Me he despertado a las 05:30 porque habíamos quedado con mi hermana en la estación de "Fuenlabrada Central" a las 07:00 y aún tenía que terminar de meteralgunas cosillas en la maleta.
Esta vez no nos lleva mi suegro a Barajas porque es probable que haya mucho tráfico.
Después de desayunar, y comprobar que habíamos apagado todo, hemos salido corriendo hacia la estación porque (como siempre) se nos había hecho tarde y mi hermana ya estaba allí esperándonos.Hemos ido en renfe hasta Atocha luego hemos cogido otro tren hacia Nuevos Ministerios y finalmente el metro hasta "Barajas". En total hemos tardado 1 hora y 15 minutos.
Como ya había impreso las tarjetas de embarque hemos ido directos a pasar el control.
Una vez pasado el control y tras llegar a nuestra puerta de embarque nos ha tocado esperar un ratín. Embarcar con Easyjet (en Madrid) es un poco pesado porquecomprueban que todas las maletas de mano de todos los pasajeros tengan las medidas exigidas y hasta que no lo comprueban no se empieza a embarcar.El vuelo ha salido con un poco de retraso pero a las 11:30 ya estábamos en Marrakech.
Tras pasar la aduana hemmos ido directos a coger un taxi. Nos ha tocado regatear y al final hemos acordado 150 dh. Por lo que había leído es lo que te suelen pedir cuando vas desde el aeropuerto a Marrakech. El regreso suele costar la mitad. Esto es debido a que en la ciudad hay más taxis con los que regatear.
Lo primero que hemos visto nada más salir del aeropuerto han sido casas grandes de color rosado (me ha recordado a los edificios de Jaipur en la India) y según nos hemos ido adentrando en la ciudad, me ha parecido que todo estaba bastante bien (nada que ver con lo que habíamos visto en la India).
Estamos alojados en el barrio llamado "Riads Zitoun", en el Riad Palmier. El chófer nos ha dejado a unos 20 metros del Riad. Nos ha costado un poco encontrar el Riad pero finalmente lo hemos encontrado. Lo mejor de todo ha sido la cara que han puesto Rocío y Miguel al entrar en el Riad. Se han quedado alucinados de lo bonito que es. La verdad que no esperas encontrarte un lugar tan maravilloso. La acogida por parte de las personas que trabajan allí ha sido muy buena, por no decir excelente. Para darnos la bienvenida, nos han sacado un té que estaba de vicio (el mejor que he probado hasta ahora) y luego nos han dado un plano y nos han explicado que es lo que podímaos ver en la ciudad.
Tras dejar las mochilas en nuestra preciosa habitación, nos hemos ido directos a la Plaza Djemaa El-Fna (en adelante La Plaza). Desde el Riad hemos tardado 10 minutos andando despacio.Mientras íbamos caminando nos ha llamado la atención lo limpio que hemos visto las calles, no hay ni una caca de perro. Nos habían dicho que estaba sucio y que olía mal y hay que decir que eso NO es cierto.La primera impresión que he tenido de "la Plaza" (como la llaman aquí) ha sido un poco decepcionante. Estaba medio vacía. Me imagino que debía ser porque eran las 13:00 de la tarde y aún no estaban montados los tenderetes. Lo primero que hemos hecho ha sido tomarnos un zumo de naranja natural. Nos ha costado 4 dh a cada uno (vale igual en todos los puestos) y está buenísimo. Nosotros lo hemos tomado en el vaso de cristal que ellos te dan, está limpio aunque me imagino que no lo lavan comoes debido.
Después nos hemos dado una vuelta por el zoco y como buenos turistas primerizos en el zoco de Marrakech... ¡nos hemos perdido por sus callejuelas!. Al final hemos vuelto a aparecer en "la Plaza" y allí hemos comido en una de los restaurantes recomendados por la Lonely, el "Restaurant Chez Chegrouni" (hemos comido un Couscous vegetal, uno de carne un Tajine y una botella de agua mineral de un litro por 170 dh en total).Tras la deliciosa comida nos hemos vuelto a adentrar en el fantástico mundo de los zocos.
Dicen que uno no conoce Marrakech hasta que se ha perdido en los zocos.
En Marrakesh los zocos están situados en las calles al norte de "la Plaza" y el sudeste del Museo de Marrakech. La vía principal es la Souq Semmarine (zoco delcuero) y sale de "La Plaza". Si la sigues recto llegas hasta el museo de Marrakech y cerca de éste está el famoso zoco de los curtidores (al que llegar es bastante complicado).
Tras pasear por los zocos y buscar sin éxito el "zoco de los curtidores", decidimos "intentar" regresar a la Plaza para tomarnos algo.
Al llegar a "La Plaza" nos quedamos sorprendidos de la cantidad de gente que había (turistas y lugareños). Ya habían montado todos los puestos de comida, y había encantandores de serpientes, sanadores, acróbatas, mujeres que te hacían tatuajes, músicos, cuentacuentos, vendedores de pociones, ...
La mejor forma de observar todo lo que sucede en la Plaza es desde lo alto de un balcón y por eso fuimos al "Café du Grand Balcon" al sur de la Plaza, cerca deRue Riad Zitoun el-Qedim. Para subir al balcón es obligatorio tomar una consumición. Nosotros nos tomamos un te cada uno (y no estaba muy bueno, precio total de los tres tes: 45 dh.).Lo mejor es tomarse un refresco. Si se va al baño hay que dar propina.
Tras descansar un rato y asombrarnos con las vistas, nos fuimos a dar otro paseo antes de volver al Riad. Al pasar por un puesto de dulces no pudimosresistirnos y nos compramos tres deliciosos pasteles de chocolate por 3 dh cada uno. ¡Riquísimos!.
Al llegar al Riad nos recibió "Rashit" (el chico que tenía turno de noche en el Riad). Nos subimos a la azotea (decorada con mucho gusto) a tomarnos unas coca-colas y él se subió con nosotros para practicar español ya que lo estaba estudiando en el Instituto Cervantes.
Tras un rato de conversación con Rashit nos fuimos a descansar.
Quedamos con Rashit en desayunar al día siguiente a las 09:00.
El despertador sonó y me levanté como si hubiera dormido 12 horas. La cama es muy buena. Soy la primera en ducharme. Miguel y Rocío siguen dormidos.
Tras asearnos y salir al patio central del Riad, vemos que no hay rastro del desayuno. Miguel sube a la azotea por si nos hubieran preparado el desayuno allí pero no hay nadie. Tras esperar varios minutos aparece Rashit con bolsas (viene de comprar el desayuno) y nos dice que en 10 minutos estará listo.El desayuno ha sido espectacular. Nos han dado café, zumo de naranja natural, bollería, tortitas con mermelada y mantequilla, macedonia de frutas... en fin... que no lo hemos podido terminar. Justo cuando estábamos desayunando nos hemos dado cuenta que no habíamos retrado el reloj y nos habíamos levantado una hora antes. En ese momento me he dado cuenta que por eso Rashit no tenía listo el desayuno. ¡qué despiste!.
Después de desayunar hemos empezado nuestra visita por los monumentos de la ciudad.
Primero hemos ido al "Palacio Badi" que está a 1 minuto andando de nuestro Riad. La entrada vale 10 dh por persona.
Este palacio fue construido a finales del siglo XVI por el sultán Ahmed Al-Mansour para conmemorar la derrota de los portugueses. Actualmente está en ruinas pero se dice que fue un palacio con más de 300 habitaciones decoradas con oro, turquesas y cristal. Lo mejor son las vistas desde lo alto ya que se ve el Atlas a lo lejos y las azoteas de los Riads con nidos de cigüeñas.
Después hemos ido al "Palacio Bahia" (llamado El Bello). Es una de las obras arquitectónicas más importantes de Marrakech, construido a finales del siglo XIX. Se tardó más de una década en construir. La parte más interesante es la del harén de las 4 esposas y las 24 concubinas. El precio de la entrada es de 10 dh por persona.
Tras visitar el Palacio nuestro objetivo era ir al Zoco de "los Curtidores" porque Miguel estaba muy interesado en verlo. Tras andar mucho, nos encontramos con una pareja mayor de guiris franceses que hablaban bastante bien castellano y nos orientaron un poco. Conseguimos llegar a la Plaza para adentrarnos en el zoco y buscar el zoco de los Curtidores. Por lo que nos dijeron los guiris, los curtidores tenían que estar cerca del "Museo de Marrakech" y decidimos ir en busca del Museo.
Pasamos todo el zoco del cuero recto y por fin conseguimos llegar al Museo.
Para entrar al Museo de Marrakech se puede sacar una entrada por 60 dh que te incluye la visita al museo, visita a la Madraza y visita a la Kouba. Si se compran las entradas por separado sale muchísimo más caro . Merece la pena entrar al Museo y a la Madraza pero la Kouba es un pérdida de tiempo.
Actualmente el Museo de Marrakech es un refugio de serenidad restaurado por la Fundación Omar Benjelloun.
Tras visitar el Palacio nuestro objetivo era ir al Zoco de "los Curtidores" porque Miguel estaba muy interesado en verlo. Tras andar mucho, nos encontramos con una pareja mayor de guiris franceses que hablaban bastante bien castellano y nos orientaron un poco. Conseguimos llegar a la Plaza para adentrarnos en el zoco y buscar el zoco de los Curtidores. Por lo que nos dijeron los guiris, los curtidores tenían que estar cerca del "Museo de Marrakech" y decidimos ir en busca del Museo.
Pasamos todo el zoco del cuero recto y por fin conseguimos llegar al Museo.
Para entrar al Museo de Marrakech se puede sacar una entrada por 60 dh que te incluye la visita al museo, visita a la Madraza y visita a la Kouba. Si se compran las entradas por separado sale muchísimo más caro . Merece la pena entrar al Museo y a la Madraza pero la Kouba es un pérdida de tiempo.
Actualmente el Museo de Marrakech es un refugio de serenidad restaurado por la Fundación Omar Benjelloun.
El patio interior está flanqueado por muestras de arte tradicional. Suele haber exposiciones itinerantes. Ahora había una exposición de pintura.
Después de comer decidimos ir a ver las Tumbas Saadíes pero al llegar ya habían cerrado. Cierran a las 16:45 y nosotros llegamos a las 17:30. Como estábamos muy cerca del Riad nos fuimos a descansar una horita para aguantar más por la noche.
Tras la siesta nos pusimos en camino hacia la Plaza. Esta vez fuimos por otra calle en la que había un montón de tiendas. Al llegar a la Plaza ya estaba todo montado y decidimos tomarnos unos tes en "Las terrazas de la Alhambra". Este sitio también es carillo pero bueno... las vistas merecen la pena. Dos tes y un batido: 55 dh (casi 6 eurazos).
En la Plaza se puede cenar en los tenderetes que montan por la tarde. Me recuerda a las fiestas de Fuenlabrada los tenderetes que se montan para cenar en los que te hacen carne a la brasa. Si se pasa cerca de ellos siempre saldrá alguien para decirte que cenes allí. Nosotros no cenamos en ninguno de ellos, no por nada en especial, simplemente porque encontramos un restaurante muy eocnómico y en el que se comía fenomenal.
El restaurante se llama "Snak Toubal". Está cerca del "Gran Balcón" en una de las salidas de la Plaza. Los platos son muy baratos, abundantes y están muy ricos. Hemos pedido dos brochetas de pollo con ensalada, patatas fritas, arroz y Rocío una tortilla francesa con patas, más una botela de agua mineral de un litro. Todo por 100 dh.
Después de cenar nos hemos ido al Riad a dormir, la verdad que ya estábamos rotitos de estar todo el día en busca del zoco de los Curtidores. Seguimos sin encontrarlos (¡me parto, Miguel está desesperado!). No damos con ellos y mira que lo hemos intentado. Mañana tenemos que conseguirlo porque sino a Miguel le va a dar algo, jajaja... la que nos está dando con el famoso zoco, ¡vaya lata!. Mi hermana creo que se lo está pasando bastante bien, me alegro de que haya venido con nosotros.
En fin... aunque tengo los pies bastante doloridos de andar en busca de los dichosos curtidores ,tengo que reconocer que me lo estoy pasando genial con estos dos personajetes. Esperemos que mañana sea un gran día y tengamos suerte en nuestra búsqueda.
19 DE DICIEMBRE DE 2010: En busca de los Curtidores II
Esta vez nos hemos levantado bien. Rashit ya tenía preparado todo. El desayuno ha vuelto a ser excelente. Aunque habíamos dicho que nos daríamos prisa en desayunar, ha sido imposible. Con tanta comida no hay quien se de prisa.
Después de llenar la panza, nos hemos dirigido hacía las Tumbas Saadíes. Entrada: 10 dh cada uno. No merece la pena. Si se tiene tiempo pues vale pero si se va con el tiempo justo, en mi opinión, no es imprescindible verlo.
Después hemos ido a ver el "Alminar de Koutoubia" para hacer unaas fotillos.
En la mezquita sólo se permite el acceso a los musulmanes pero los jardines son públicos. Cinco veces al día una voz se alza sobre el alboroto de la Plaza para la llamada a la oración. Es el muecín en lo alto del alminar de la mezquita de Koutoubia, que se dirige a los fieles de los cuatro puntos cardinales. El minarete de Koutoubia es la mayor aspiración para los muecines del lugar.Es una torre de 70 metros de altura y en ella se han basado otros monumentos como la Giralda de Sevilla. Originalmente fue revestido con escayola rosada pero en 1990 se restauró y se dejó al descubierto la mampostería.
Después nos hemos adentrado de nuevo en el zoco para buscar a los Curtidores. Más o menos sabíamos por donde podían estar y tras andar mucho y volver hacia atrás varias veces, por fin hemos conseguido encontrar el "Zoco de los Curtidores".
Un señor mayor que iba andando con una moto nos ha llevado hasta la puerta de un lugar donde estaban trabajando. El olor era asqueroso. Nos han dado
unos ramitos de menta a cada uno para que lo oliésemos y así ag
uantásemos mejor el mal olor. Aún así, a mi me daban arcadas pero Miguel y Rocío lo han aguantado bien. Después nos han llevado a una terraza desde la que se podían hacer las típicas fotos y allí hemos ido como locos.
Al terminar el chico que nos había llevado a la terraza nos ha pedido 100 dh de propina y le hemos dicho que "no". ¡qué morro!, por 10 minutos que hemos estado con él nos pide casi 10 euros. Al final le hemos dado 40 dh (unos 4 euros) y se ha quedado mosqueado. Nosotros por si las moscas nos hemos ido de allí.
Bueno... ¡objetivo conseguido!.
Miguel se ha quedado un poco decepcionado. La verdad que no ha sido como esperábamos porque pensábamos que las fotos que se podrían hacer serían mejores pero bueno... habrá que conformarse.
Después nos hemos dirigido hacia la Plaza para ir en taxi al "Jardín Majorelle". Hemos tenido que regatear con el taxista y al final nos ha llevado por 20 dh a los tres(unos 2 euros). El jardín Majorelle está en el barrio llamado "Ville Nouvelle". Por lo que hemos podido ver en el taxi y por lo que nos ha contado Rashit (el chico del Riad) es un barrio bastante más caro, hay hoteles lujosos, casas y apartamentos.
El pintor paisajista Jacques Majorelle creó este jardín en 1924 y más tarde el modisto Yves Saint Laurent y Pierre Bergëre lo compraron y se lo regalaron a la ciudad de Marrakech.Dentro del jardín hay un museo de arte islámico.
La entrada al jardín cuesta 40 dh por persona y si se quiere entrar al museo hay que pagar más (nosotors sólo entramos al jardín). El jardín es bonito pero no tanto como nos habían dicho. De saberlo no hubiera ido.
El regreso a la Plaza nos ha vuelto a costar 20 dh en total pero hemos tenido que regatear más que con el taxi que nos trajo al jardín.
Hemos vuelto a comer a "Snack Toubkal" y hemos comido genial (Miguel se ha pedido una sopa, un couscous y Rocío y yo nos hemos pedido cada una un plato combinado y una botella de agua mineral de litro, todo por 108 dh).
Tras comer nos hemos ido a hacer compras por el zoco porque ya es nuestro último día.
Hemos comprado pocas cosas, sobretodo especias y pañuelos para el cuello. Reggatear es lo quemás pesado se me hace. Hay veces que por no regatear no quiero comprar. Hemos estado toda la tarde en los zocos.
Luego hemos ido al "Gran balcón" para tomar unos refrescos ya que estábamos bastante cansados de andar. Luego hemos ido a unas tiendas donde vendían zapatillas a un precio muy barato. Cuando me las he probado me ha dado cuenta de por qué son tan baratas. Están bastante mal hechas, no quedan bien cuando te las pones. En fin... que no he comprado nada.
Repetimos en "Snack Toubkal"para cenar, ya no queremos ir a otro sitio porque en este restaurante se come de maravilla y es muy económico. Al final nos han dado las 23:00 d ela noche. Mañana sólo tenemos unas 3 horas para terminar de hacer compras antes de ir al aeropuerto.
20 DE DICIEMBRE DE 2010: Regreso a España
Hemos intentado madrugar un poco más para poder hacer unas cuantas compras antes de ir al aeropuerto. El desayuno ha vuelto a ser magnífico. Hemos hecho el check-out en el Riad y les hemos dicho que a las 10:45 regresaríamos a por las mochilas. Les hemos pagado las 2 coca-colas que nos habíamos tomado la primera noche y nos hemos despedido de todos. A Rashit le hemos dado 100 dh de propina por lo amable que ha sido con nosotros.
Hemos hecho las últimas compras en el zoco (especias) y nos hemos tomado el "penúltimo" zumo de naranja, mmmm... ¡qué rico está!.
A las 11:00 hemos llegado al Riad y tras coger las maletas nos hemos ido a buscar un taxi para ir al aeropuerto. Hemos ido casi hasta la Plaza porque allí hay muchos taxis. Tras regatear con un taxista hemos acordado que nos llevara por 60 dh.
A las 11:30 estábamos en el aeropuerto. Hemos tenido que hacer el check-in y eso nos ha retrasado mas. Después hemos cambiado los dirhams que nos quedaban y hemos pasado los controles de seguridad y la aduana. Antes de pasar los controles hay un poli en la puerta que comprueba que tengas la documentación en regla y te da para rellenar el cartoncillo en la que dejas constancia tus datos, el lugar de donde vienes y a donde vas (no recuerdo como se llama el cartoncillo). Para pasar el control hay dos filas, una de hombres y otra de mujeres. No hemos tenido problemas en pasar el control y eso que llevaba un botecillo de champú que era más grande de lo permitido.
El embarque se ha efectuado a la hora prevista y esta vez no ha habido control de las dimensiones de las maletas porque ya las habían hecho en el check-in. El avión ha salido sin retrasos y el vuelo ha sido muy bueno.
A las 15:45 estábamos en Barajas, de nuevo en Madrid.
CONCLUSION SOBRE MARRAKECH
La impresión que me llevo de Marrakech es muy buena. Antes de hacer el viaje, la gente con la que había hablado me habían hablado mal de Marrakech (decía que las calles estaban sucias, que olía mal, que te acosaban mucho y demás acontecimientos que a algunas personas les ocurren en los viajes ya sea por que no han viajado mucho o porque tienen mala suerte).
Nosotros nos hemos llevado una grata sorpresa porque nos ha parecido una ciudad bastante occidental . Las calles estaban muy limpias (hay bastantes barrenderos haciendo su trabajo contínuamente) y no había olores, salvo en el zoco de "los Curtidores" donde el olor es bastante fuerte debido a los tintes para el cuero. Me imagino que tal vez en verano pueda haber más olores pero eso es normal. Las personas con las que hemos tratado, tanto en el Riad, en la calle, en los puestos callejeros, en los zocos... han sido muy amables y no hemos tenido ningún problema en ningún momento. Hay personas que se te acercan y te preguntan dónde quieres ir pero en cuento los dices que no quieres que te acompañen te dejan tranquilo. Hay que pensar que estas personas viven del turismo, de sacar unos dirhams al turista.
Bueno... ¡objetivo conseguido!.
Miguel se ha quedado un poco decepcionado. La verdad que no ha sido como esperábamos porque pensábamos que las fotos que se podrían hacer serían mejores pero bueno... habrá que conformarse.
Después nos hemos dirigido hacia la Plaza para ir en taxi al "Jardín Majorelle". Hemos tenido que regatear con el taxista y al final nos ha llevado por 20 dh a los tres(unos 2 euros). El jardín Majorelle está en el barrio llamado "Ville Nouvelle". Por lo que hemos podido ver en el taxi y por lo que nos ha contado Rashit (el chico del Riad) es un barrio bastante más caro, hay hoteles lujosos, casas y apartamentos.
El pintor paisajista Jacques Majorelle creó este jardín en 1924 y más tarde el modisto Yves Saint Laurent y Pierre Bergëre lo compraron y se lo regalaron a la ciudad de Marrakech.Dentro del jardín hay un museo de arte islámico.
La entrada al jardín cuesta 40 dh por persona y si se quiere entrar al museo hay que pagar más (nosotors sólo entramos al jardín). El jardín es bonito pero no tanto como nos habían dicho. De saberlo no hubiera ido.
El regreso a la Plaza nos ha vuelto a costar 20 dh en total pero hemos tenido que regatear más que con el taxi que nos trajo al jardín.
Hemos vuelto a comer a "Snack Toubkal" y hemos comido genial (Miguel se ha pedido una sopa, un couscous y Rocío y yo nos hemos pedido cada una un plato combinado y una botella de agua mineral de litro, todo por 108 dh).
Tras comer nos hemos ido a hacer compras por el zoco porque ya es nuestro último día.
Hemos comprado pocas cosas, sobretodo especias y pañuelos para el cuello. Reggatear es lo quemás pesado se me hace. Hay veces que por no regatear no quiero comprar. Hemos estado toda la tarde en los zocos.
Luego hemos ido al "Gran balcón" para tomar unos refrescos ya que estábamos bastante cansados de andar. Luego hemos ido a unas tiendas donde vendían zapatillas a un precio muy barato. Cuando me las he probado me ha dado cuenta de por qué son tan baratas. Están bastante mal hechas, no quedan bien cuando te las pones. En fin... que no he comprado nada.
Repetimos en "Snack Toubkal"para cenar, ya no queremos ir a otro sitio porque en este restaurante se come de maravilla y es muy económico. Al final nos han dado las 23:00 d ela noche. Mañana sólo tenemos unas 3 horas para terminar de hacer compras antes de ir al aeropuerto.
20 DE DICIEMBRE DE 2010: Regreso a España
Hemos intentado madrugar un poco más para poder hacer unas cuantas compras antes de ir al aeropuerto. El desayuno ha vuelto a ser magnífico. Hemos hecho el check-out en el Riad y les hemos dicho que a las 10:45 regresaríamos a por las mochilas. Les hemos pagado las 2 coca-colas que nos habíamos tomado la primera noche y nos hemos despedido de todos. A Rashit le hemos dado 100 dh de propina por lo amable que ha sido con nosotros.
Hemos hecho las últimas compras en el zoco (especias) y nos hemos tomado el "penúltimo" zumo de naranja, mmmm... ¡qué rico está!.
A las 11:00 hemos llegado al Riad y tras coger las maletas nos hemos ido a buscar un taxi para ir al aeropuerto. Hemos ido casi hasta la Plaza porque allí hay muchos taxis. Tras regatear con un taxista hemos acordado que nos llevara por 60 dh.
A las 11:30 estábamos en el aeropuerto. Hemos tenido que hacer el check-in y eso nos ha retrasado mas. Después hemos cambiado los dirhams que nos quedaban y hemos pasado los controles de seguridad y la aduana. Antes de pasar los controles hay un poli en la puerta que comprueba que tengas la documentación en regla y te da para rellenar el cartoncillo en la que dejas constancia tus datos, el lugar de donde vienes y a donde vas (no recuerdo como se llama el cartoncillo). Para pasar el control hay dos filas, una de hombres y otra de mujeres. No hemos tenido problemas en pasar el control y eso que llevaba un botecillo de champú que era más grande de lo permitido.
El embarque se ha efectuado a la hora prevista y esta vez no ha habido control de las dimensiones de las maletas porque ya las habían hecho en el check-in. El avión ha salido sin retrasos y el vuelo ha sido muy bueno.
A las 15:45 estábamos en Barajas, de nuevo en Madrid.
CONCLUSION SOBRE MARRAKECH
La impresión que me llevo de Marrakech es muy buena. Antes de hacer el viaje, la gente con la que había hablado me habían hablado mal de Marrakech (decía que las calles estaban sucias, que olía mal, que te acosaban mucho y demás acontecimientos que a algunas personas les ocurren en los viajes ya sea por que no han viajado mucho o porque tienen mala suerte).
Nosotros nos hemos llevado una grata sorpresa porque nos ha parecido una ciudad bastante occidental . Las calles estaban muy limpias (hay bastantes barrenderos haciendo su trabajo contínuamente) y no había olores, salvo en el zoco de "los Curtidores" donde el olor es bastante fuerte debido a los tintes para el cuero. Me imagino que tal vez en verano pueda haber más olores pero eso es normal. Las personas con las que hemos tratado, tanto en el Riad, en la calle, en los puestos callejeros, en los zocos... han sido muy amables y no hemos tenido ningún problema en ningún momento. Hay personas que se te acercan y te preguntan dónde quieres ir pero en cuento los dices que no quieres que te acompañen te dejan tranquilo. Hay que pensar que estas personas viven del turismo, de sacar unos dirhams al turista.
La propina no es sólo costumbre sino una de las principales fuentes de ingresos. Lo normal es dejar a los camareros entre un 10% y un 15% del total. Al personal del Riad se suele dar unos 20 dh al personal que limpia la habitación y a los taxistas siempre hay que regatearlas y ahí estaría incluía la propina.
Sobre la inseguridad decir que no nos hemos sentido inseguros. Seguro que hay carteristas y personas con malas intenciones pero eso pasa en Madrid, en Nueva York, en Londres... . ¿A cuántos guiris roban en el centro de Madrid?.
La gastronomía nos ha gustado muchísimo, son muy buenos cocineros. Lo mejor y que nadie puede irse sin probar son sus dulces, ¡riquísimos!. Hay gente que dice que son muy empalagosos pero los que nosotros hemos probado estaban fenomenal.
Los zumos en los puestos de la Plaza son otra cosa imprescindible que hay que tomar en Marrakech.
En los zocos no hemos tenido ningún problema, hay algunos que te dicen "amigo, pasa y mira, sólo mirar" , "más barato que en Carrefour", pero nada fuera de lo normal. Vuelvo a repetir: viven del turismo.
Sobre el regatero decir que nosotros ya estábamos acostumbrados por nuestro viaje a la India y por eso no nos ha sorprendido, ni hemos tenido ningún problema a la hora de regatear. Me imagino de no haber ido primero a India, el regateo se nos hubiera dado peor.
Sobre la mujer marroquí tengo que decir que aunque se nota que es un país en donde la mujer sigue estando sometida al marido pero se las ve muchísimo más occidentalizadas que en la India (hay una grandísima diferencia). Hay mujeres que llevan burca, otras que sólo llevan velo y otras que van igual o más arregladas de lo que pueda ir cualquier mujer Occidental. He visto a mujeres conduciendo coches y motos. Donde no hemos visto mujeres es en los bares a los que van los marroquíes. Ellas suelen salir juntas y los hombres salen juntos.
Me llevo un gran recuerdo de mis cuatro días en Marrakech, primero porque me ha agradado mucho todo lo que he visto, sus gentes, sus costumbres, su comida, sus colores y segundo porque he viajado con dos personas maravillosas que han hecho que todo haya sido aún mejor. Como hago siempre que voy a un lugar, voy a poner nota a mi viaje y Mi nota es un 9. Miguel y Rocío han puesto un 7 a Marrakech. Mi hermana dice que no le han gustado mucho las especias y a la hora de comer decía que le picaba la comida. Y Miguel no ha podido hacer tantas fotos como hubiera querido porque a los marroquiés no les gusta que les estén haciendo fotos (dicen que les roba el alma) y te dicen qe no les hagas fotos o que les des dinero.
En los zocos no hemos tenido ningún problema, hay algunos que te dicen "amigo, pasa y mira, sólo mirar" , "más barato que en Carrefour", pero nada fuera de lo normal. Vuelvo a repetir: viven del turismo.
Sobre el regatero decir que nosotros ya estábamos acostumbrados por nuestro viaje a la India y por eso no nos ha sorprendido, ni hemos tenido ningún problema a la hora de regatear. Me imagino de no haber ido primero a India, el regateo se nos hubiera dado peor.
Sobre la mujer marroquí tengo que decir que aunque se nota que es un país en donde la mujer sigue estando sometida al marido pero se las ve muchísimo más occidentalizadas que en la India (hay una grandísima diferencia). Hay mujeres que llevan burca, otras que sólo llevan velo y otras que van igual o más arregladas de lo que pueda ir cualquier mujer Occidental. He visto a mujeres conduciendo coches y motos. Donde no hemos visto mujeres es en los bares a los que van los marroquíes. Ellas suelen salir juntas y los hombres salen juntos.
Me llevo un gran recuerdo de mis cuatro días en Marrakech, primero porque me ha agradado mucho todo lo que he visto, sus gentes, sus costumbres, su comida, sus colores y segundo porque he viajado con dos personas maravillosas que han hecho que todo haya sido aún mejor. Como hago siempre que voy a un lugar, voy a poner nota a mi viaje y Mi nota es un 9. Miguel y Rocío han puesto un 7 a Marrakech. Mi hermana dice que no le han gustado mucho las especias y a la hora de comer decía que le picaba la comida. Y Miguel no ha podido hacer tantas fotos como hubiera querido porque a los marroquiés no les gusta que les estén haciendo fotos (dicen que les roba el alma) y te dicen qe no les hagas fotos o que les des dinero.
Como punto final a mi viaje diré que Marrakech se puede ver en 2-3 días perfectamente (si se quiere hacer alguna excursión se necesitan más días dependiendo de a dónde se quiera ir).
Es imprescindible ver lo siguiente:
- Observar el espectáculo constante de la plaza
- Tomarse un zumo (o todos los que se puedan)
- Comer dulces marroquíes
- Ir al centro intelectual de la medina
- Escuchar al muecín sus plegarias
- Alojarse en un Riad
- Tomar un delicioso te
- Disfrutar de una tarde en los zocos
Tatii!!
ResponderEliminarMe lo pasé genial y a ver cuál es el próximo viaje al que me puedo apuntar :)
Gracias por dejarme ir ^^
Me alegro que disfrutaras. A mi me encantó que vineras con nosotros. Tenía razón Miguel:"Se estaba mejor que en el patio de la cárcel"...jajaja
ResponderEliminarHola a todos:
ResponderEliminarSoy marroquí de Agadir (al suroeste de Marrakech) y he leído línea por líenea el viaje que hiciste a la ciudad roja (Marrakech).
Quisiera decirte que si hubieras visitado las afueras de la ciudad lo habrías pasado bomba: el valle de Urika, Ukaimden, Siti Fadma... Son pueblecitos con paisajes naturales maravillosos. En fin, ya sé que sólo disponíais de 4 días y que no os daba el tiempo.
Bueno, que tengas suerte en tus futuros viajes.
Saludos.
lahoucine.
Que interesante! Gracias
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